Quevedo

El peor parking de Madrid. No tiene ascensores a la calle, solo entre las diferentes plantas, por lo que no está adaptado a minusválidos ni para ir con carritos de bebés. Las plazas son muy estrechas y un coche un poco ancho tiene problemas. Y lo peor de todo el precio, exageradamente alto

De verdad merece la pena, el precio un poco alto, pero súper cómodo y tiene las típicas maquinas que te gestionan todo sin tener que ir a la cabina a pagar al operario.